Por: EL ESPECTADOR
Política 18 Junio 2008 - 9:15pm
El senador del Polo Democrático Gustavo Petro se mostró sorprendido ante los cuestionamientos recibidos luego de la entrevista que concedió a El Espectador, en la que anunciaba su intención de ser candidato presidencial y lanzaba fuertes críticas a su partido y al sectarismo de la izquierda tradicional.
Gustavo Petro fue quien habló primero de una alianza anti-reelección.
Una de las reacciones más fuertes vino del representante a la Cámara Wilson Borja, quien le dijo que esa izquierda tradicional podría terminar diciéndole al país “las cosas que él hacía con los actores armados ilegales”.
Petro aclaró que en sus respuestas decía que la reelección presidencial se estaba construyendo a partir de una alianza con la mafia, dada la actitud que tomó el Gobierno al hundir la reforma política. “Sin embargo, no vi reacciones del uribismo. Me sorprendieron las reacciones de mis propios compañeros”, señaló.
El congresista insistió en la necesidad de una alianza anti-reelección para escoger a un candidato único que enfrente al presidente Uribe, la misma propuesta que ya pusieron sobre la mesa el ex alcalde Lucho Garzón y el jefe del liberalismo, César Gaviria. “A un sector de la izquierda no le gusta mi propuesta de acuerdo nacional, porque suponen que es uribista. Olvidan que la Constitución del 91 se construyó tras una concertación entre todos los colombianos”.
Y frente a la dura respuesta de Borja, manifestó que ese es el sectarismo de la izquierda tradicional que él critica. Por último, enfatizó en que las soluciones a los problemas del país sólo pueden ser construidas a partir de un complejo pero rápido proceso de concertación entre las fuerzas sociales y políticas más visibles. “La paz se hace entre los enemigos, nunca entre los amigos, que ya la tienen. La importancia de un acuerdo nacional, incluidos todos los sectores de la sociedad —entre ellos los uribistas—, es imprescindible si queremos sacar a Colombia de la guerra”.